domingo, 14 de julio de 2013

Equipos de Alto Desempeño: No perdemos, no empatamos, todos los partidos los ganamos


“… a veces la sencillez de las ideas solo contrasta con la dificultad de ponerlas en práctica”. Patrick Lencioni.

Existen muchos documentos en internet, en libros, información de charlas, seminarios que nos dicen cómo lograr trabajar armoniosamente en equipo, y salimos siempre de esas charlas con un espíritu innovador y con propósitos de cambiar las organizaciones, pero cuando vamos y lo ponemos en práctica, nos encontramos con la dificultad de no poder cumplir con nuestros propósitos y volvemos a hacer las mismas cosas que estamos acostumbrados a hacer.
El recurso más importante de las organizaciones son las personas, y ellas requieren trabajar en equipo para poder alcanzar los objetivos que la empresa se ha trazado, y si esas personas no trabajan en equipo de forma adecuada, entonces esos objetivos no serán alcanzados.

Qué es lo que está fallando?. Por qué es difícil comprender al jefe? Por qué es más fácil culpar a mi compañero de trabajo cuándo algo no sale bien?

El autor de un libro llamado “Las 5 disfunciones de un equipo” , Patrick Lencioni, afirma que la mayoría de equipos presenta síntomas de cinco tipos de enfermedades malignas que no permiten el éxito en conjunto, y son:
1.       Ausencia de confianza: los miembros de los equipos se ocultan mutuamente debilidades y errores, dudan de pedir ayuda o pedir opiniones, se llega a conclusiones y juicios a priori sobre actitudes de otros sin tratar de aclararlas, se ocultan los resentimientos.

2.       Temor al conflicto: se ignoran debates decisivos para el éxito del equipo sin importar que se perciba una armonía artificial

3.       Falta de compromiso: se presentan ambigüedades acerca de la dirección y las prioridades del equipo y de la organización, se produce temor al error y al fracaso.

4.       Evasión de la responsabilidad compartida: el peso de la disciplina y el seguimiento recae únicamente sobre el líder ya que se crean resentimientos entre miembros con diferentes conceptos de rendimiento.

5.       Desatención al resultado en conjunto: cuando los miembros del equipo no resultan responsables ante los demás de los resultados conjuntos , desatienden el resultado común y se centran en sus resultados individuales de área, por el ego de las personas.

Y cómo eliminar esas 5 enfermedades y convertirlas en oportunidades para alcanzar equipos de alto desempeño?
Para construir confianza es necesario tener la capacidad de compartir abiertamente nuestras debilidades, errores y temores, es poder decir: me equivoqué, no sé o necesito ayuda. Las personas de un equipo, independiente de tu posición en la estructura de las organizaciones deben tener la suficiente valentía para admitir frente a sus compañeros las debilidades, de lo contrario, todos creen que esa persona será capaz de cumplir con la tarea y nadie podrá soportar el vacío que existe, viéndose el resultado final afectado.

Además, cuando los miembros del equipo confían entre ellos, no temen involucrarse en un diálogo intenso, profundo y enriquecedor alrededor de los asuntos y las decisiones que son verdaderamente críticas para el éxito de la organización. No temen estar en desacuerdo y manifestarlo o confrontar sanamente con otros ya que siempre el único fin es llegar a las mejores respuestas y tomar las decisiones más apropiadas. Esto es No temer al conflicto!.
Los equipos que se permiten abordar y resolver conflictos de manera abierta, logran compromisos reales con las decisiones comunes aún cuando algunos de sus miembros estén inicialmente en desacuerdo, esto gracias a que se aseguran que todas las ideas y las opiniones se ponen libremente sobre la mesa y se consideran antes de tomar una decisión crucial. Todas las voces son escuchadas y se decide a favor del equipo, por lo tanto todos se sienten comprometidos!. Una persona ignorada pierde el interés y finalmente no se compromete.

Todos comprometidos tendremos la disposición de tener responsabilidades compartidas, ya que los miembros del equipos no estarán comparando quién hizo más o menos, sino que todos estarán consientes de las debilidades de los demás por la confianza que se tienen, las han expuesto porque no temen al conflicto, y los han tenido en cuenta y eso los motiva y los hace comprometerse. Por lo tanto será posible que todos sean consientes de que si hay éxito será de todos y lo mismo si habrá fracasos.
Con todo lo anterior, los miembros de los equipos son capaces de dejar de lado las necesidades y agendas individuales para enfocarse exclusivamente en lo mejor para el equipo y no anteponen los intereses particulares a los comunes, logrando: Una atención enfocada al resultado común!.

Suena sencillo implementar 5 claves para tener equipos de alto desempeño, pero esto requiere de la transformación de las personas desde el ser, no desde la parte técnica exclusivamente, esto de equipos de alto desempeño necesita de calidad y transparencia humana: los equipos están hechos de personas!.
Pero no hay que olvidar que todo esto debe estar vigilado por los líderes de los equipos: el líder de los equipos de alto desempeño debe tener la capacidad de diseñar emociones que lleven a la acción óptima para alcanzar un resultado extraordinario.

Por lo tanto, ese líder debe poder gestionarse a sí mismo y dar ejemplo así será una persona que los demás seguirán con convicción, debe poder gestionar a las personas de su equipo, y poder gestionar las relaciones entre todos los miembros del equipo. Así logrará articulación y funcionamiento en armonía de todo el equipo.
Pero quisiera finalizar haciendo énfasis en que es importante el resultado, en alcanzar los objetivos, pero una organización no es efectiva si sólo tiene este componente, sino que las personas que trabajan para alcanzar esos objetivos lo deben hacer de una forma saludable y cómoda para ellas, a través de lo que he hablado en este ensayo: de trabajos de alto desempeño.

 
Bibliografía
Lencioni P. (2003). Las cinco disfunciones de un equipo: Un Inteligente Modelo para Formar un Equipo Cohesionado y Eficaz (3era. Ed.).

No hay comentarios:

Publicar un comentario